A MODO DE PRESENTACION

Ya esta. El sueño se cumplió. Dejare de escribir en las paredes, ahora tengo mi pagina propia. Soy un periodista de alma, que desde hace 40 años vive y se alimenta de noticias. Tenia 18 años cuando me recibieron en El Liberal de Santiago del Estero, el doctor Julio Cesar Castiglione, aquien le debo mucho de lo que soy me mando a estudiar dactilografia. Ahí estaba yo dando mis primeros pasos en periodismo al lado de grandes maestros como Noriega, Jimenez, Sayago. Gracias a El Liberal conocí el mundo. Viaje varias veces a Europa, Estados Unidos, la lejana Sudafrica y América del Sur, cubriendo las carreras del "Lole" Reutemann en la Formula 1. Después mi derrotero continuo en Capital Federal hasta recalar para siempre en Mar del Plata, donde nacieron tres de mis cinco hijos y conocí a Liliana, el gran amor de mi vida. Aquí fui Jefe de Redacción del diario El Atlántico y tuve el honor de trabajar junto a un enorme periodista, Oscar Gastiarena. De el aprendí mucho. Coqui sacaba noticias hasta de los edictos judiciales. Bueno a grandes rasgos ese soy yo. Que es Mileniomdq, una pagina en la web en donde encontraras de todo. Recuerdos, anedoctas, comentarios. Seré voz y oídos de mis amigos. Ante un hecho de injusticia muchas veces quisistes ser presidente para ir en persona al lugar y solucionar los temas. Eso tratare de ser yo. Una especie de justiciero ante las injusticias, valga el juego de palabra. No faltaran mis vivencias sobre mi pago, Visiten el lugar, estoy seguro que les gustara. Detrás de mis comentarios idiotas se esconde un gran ingenio.

miércoles, 29 de febrero de 2012

ALBERTO CABRERA, EL SEÑOR BASQUET


Alberto Cabrera nació el 16 de diciembre de 1945 en Bahía Blanca y comenzó a jugar a los 7 años en Estudiantes de Bahía Blanca . Le decian "El mago". Aunque no tenía un físico estilizado, sus primeros movimientos en el campo demostró que Cabrera fue especialmente capacitado para controlar y pasar el balón y él era también bueno para defender, por ser un excelente bloqueador debido a su timming para saltar. No sólo era un estratega, tambien un gran goleador,  ​​un promedio de 28 puntos en una temporada. Por otra parte, su experiencia después de muchos años de carrera y de su permanente interés en el juego hizo merecedor de los apodos de Cabrera, como "El Mago" (El Mago, en español). 
Su debut en Primera División fue el 30 de noviembre de 1961. En 1963, Cabrera ganó su primer título con Estudiantes de La Plata, al derrotar 49-42 a Independiente en el juego final. Sólo tenía 17 años.
Atilio Fruet fue el jugador líder del Olimpo , el otro equipo de Bahía Blanca, que disputó algunos de los juegos más importantes contra Estudiantes de La Plata durante los años 70. Acerca de Cabrera, Fruet dijo:
""Solíamos decir que éramos rivales porque jugamos en equipos diferentes, pero tenemos en cuenta unos a otros a un amigo. Cuando recibió el premio me sentí como si hubiera ganado el premio y no a él. Algunas personas discuten sobre quién era el mejor jugador ., Cabrera ni a mí, pero me sentí halagado por el hecho de ser comparado con él: era un jugador exquisito, mientras yo era más bien un apasionado Él era un jugador de baloncesto extraordinario y que siempre será recordado como un gigante ".. "

Cabrera también jugó 8 años para el equipo de baloncesto nacional de la Argentina , con un total de 16 partidos disputados. Su debut fue en el  Mundial Extra de Chile en 1966, jugando entonces los 1967 y 1974 FIBA Campeonato del Mundo que tuvo lugar en Uruguay y Puerto Rico , respectivamente. Su promedio de puntuación fue de 11,5 puntos.
El 16 de enero de 1984, Cabrera se retiró de la actividad de ganar un Torneo Bahiense del campeonato. Murió de leucemia el 12 de agosto de 2000.

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HACE 100 AÑOS SE CAIA LA PIEDRA MOVEDIZA DE TANDIL



La Piedra Movediza de Tandil fue una roca de aproximadamente 300 toneladas que se localizaba en la ciudad bonaerense de Tandil. La particularidad de dicha mole de granito fue que logró mantenerse en equilibrio al borde de un cerro hasta el día de su caída definitiva, el jueves 29 de febrero de 1912 entre las 5 y las 6 de la tarde (sin haberse podido determinar el momento exacto) y aparentemente sin testigos directos en el preciso momento de su derrumbamiento.
Se cree que su caída fue un acto de vandalismo o producto de las vibraciones provocadas por las explosiones en las canteras cercanas.
La piedra original se encuentra en la base del cerro, partida en tres grandes pedazos. Desde 2007 existe una réplica ubicada exactamente en el mismo lugar, siendo el mayor símbolo de la ciudad de Tandil. El predio recibió el nombre de Parque Lítico La Movediza.

EL HOMBRE MAS PEQUEÑO DEL MUNDO


Un nepalés de 72 años, nacido en un valle remoto del suroeste del país himalayo, fue declarado este domingo el hombre más pequeño por el libro Guinness de los récords.
Chandra Bahadur Dangi mide exactamente 54,6 centímetros, es decir, 5,3 menos que el filipino Junrey Balawing, a quien en junio se le atribuyó el título de hombre más pequeño del mundo.
'Si realmente tiene 72 años, es con diferencia la persona más vieja designada como la más pequeña del mundo desde la creación del Guinness de los récords hace 57 años', declaró Craig Glenday, redactor jefe de la publicación.
Chandra Bahadur Dangi, que pesa 12 kilos, también el más bajito designado por Guinness. Dangi reconoció recientemente a la AFP que este 'reconocimiento' compensa en cierta manera los años de sufrimiento. Huérfano desde los 12 años, fue acogido por miembros de su familia que le exponían en ferias como fenómeno y se embolsaban el dinero.
Después ganó su vida, modestamente, tejiendo fajas de yuta y sólo ha salido unas cuantas veces de su pueblo, situado en una zona paupérrima de Nepal, la región de Dang, a 350 km de Katmandú. Chandra Bahadur Dangi viajó a la capital nepalesa por primera vez para participar en las ceremonias del Guinness. 'Quiero visitar países extranjeros y encontrar gente a través del mundo', declaró.
Khangendra Thapa Magar, otro nepalés que también ostentó el mismo título, visitó Europa y EEUU y figuró en los carteles de una campaña que promovía Nepal como destino turístico, que le mostraban como el hombre más pequeño del mundo en el país que alberga la montaña más alta del globo, el Everest. Las causas de la pequeña estatura sigue siendo un misterio pero la mayoría de hombres y mujeres designados como las personas más pequeñas del mundo sufren de 'enanismo primordial'.(bing)

CARTA ABIERTA AL SECRETARIO DE TRANSPORTE


Señor Secretario de Transportes (y funcionarios con rangos superiores):

Soy una usuaria más del tren Sarmiento. Hago el recorrido Once-Moreno todos los días y estuve en el tren que chocó el 22 de febrero pasado. Y quiero contarles que el accidente no me sorprendió.
No sé cuántos artículos se habrán escrito sobre lo mal que se viaja, ni cuantos conductores de TV se subieron a un tren con una cámara, pero hacer una de estas notas ya resulta un cliché.
Yo quiero hablar desde otro punto de vista: el problema es aún más grave que trenes que llegan tarde, se cancelan o la inmensa cantidad de gente que viaja cada día.
El problema es que TBA, quien tiene la concesión del Sarmiento, es una empresa diabólica.

Lo digo porque TBA afecta la personalidad de la gente, causando estragos.
 TBA transforma a la gente. Los vuelve psicóticos. Aquella señora que está comprando pan, en el Sarmiento golpea niños para poder sentarse.
Aquel muchacho que toca la guitarra en la esquina, se transforma en un torpedo ingresando en el tren, atropellando a quien sea que esté a su alrededor.
¿Y qué es lo que pasa? TBA le quita el alma a la gente.

Voy a hablar de lo que me pasa a mí, pero estoy segura de que todos los pasajeros del tren se sentirán identificados: Fuera del Sarmiento, soy una persona normal. Me encantan los gatos, abuso del sarcasmo y adoro a los Beatles. Mi trabajo es de ensueño: hago control de calidad de video juegos. Me levanto todos los días temprano, y me voy a la estación de Moreno, mientras mi espíritu se apaga lentamente.
Cuando llego al andén, me siento miserable. El espacio está sucio y repleto de gente, y no hay ningún tren. Mientras más tiempo pasa sin tren en el andén, más siento que la angustia se apodera de mi alma. Porque sé cómo será el viaje.
Cuando llega el tren, siento que somos una manada de cerdos a la que le acaban de echar comida en el platón. El tren llega lleno, porque la gente de las siguientes estaciones que va a Once se toma el tren a Moreno, para asegurarse un asiento cuando ese mismo tren vuelva hacia Once.
Pasamos todos a ser un grupo de miserables que tiene que golpear al prójimo o ser golpeado para entrar.
Mi manera de pensar no me permite golpear a nadie y por eso todas las mañanas recibo golpes, tirones de pelo, pisadas, y alguna que otra vez tirones en la ropa que me la terminan rompiendo.
Todo esto para conseguir un asiento o un lugar más o menos cómodo en un tren sucio, con olor a pis, ventanas que no abren o no cierran, o directamente sin ventanas, cables hacia afuera, ningún extinguidor ni tacho de basura, chispas que salen de las ruedas, ventiladores no andan, los pisos rotos con los que la gente se tropieza. Hay agujeros en el suelo y en los fuelles, y podemos viajar mirando las vías.

Los pasajeros tenemos horarios que cumplir, y a TBA no le importa porque ni siquiera cumple los suyos. Perdemos presentismo y premios cuando TBA quiere.
El Sarmiento es lo más putrefacto de la sociedad. Todas las inmundicias que rodean el mundo se concentran homogéneamente en cada vagón.
El tren es una sociedad en la que cada ser es perfectamente egoísta y agresivo, en la que la avivada criolla es una virtud respetada y admirada. Una sociedad donde está bien golpear a cualquier persona que esté cerca nuestro, con tal de sentarnos.
He visto a adultos golpear y empujar bebés. Y cuando termina la salvajada, la gente se ríe. Porque, claro -dicen ellos- "si no te lo tomás con humor, vas a vivir angustiado".

Pero no culpo a la gente, no. Culpo a  TBA, quien con su manejo del transporte público nos enseñó que si no te sentás en el tren viajás tan pero tan mal que te queda doliendo todo hasta el día siguiente. Nos enseñó que si no empujás al que está al lado tuyo, él te va a empujar y lastimar a vos. Nos enseñó que es una guerra y que tenés que matar o morir.
Llegué al punto de llorar todos los días en el andén. ¿Saben por qué? Porque TBA es una máquina succionadora de almas. Ellos nos tratan como basura, y nosotros asumimos ese rol aceptando viajar en las repugnantes condiciones en las que viajamos. He llegado a creer que TBA es el mismísimo Demonio.
Y yo me bajo en cualquier andén y lloro. Lloro casi todos los días. Porque si hay algo que TBA no me va a quitar, es el alma. Yo aún tengo la mía y sufro, y lloro. Y me alegra llorar porque significa que todavía siento. Significa que no estoy dispuesta a perderla, así como pierdo mi dignidad cada vez que me subo al andén.

Y hoy lloro porque TBA nos quitó los cuerpos de 51 personas que viajaban conmigo. Sus últimos momentos de vida lo pasaron despojados de su dignidad y personalidad. Murieron siendo un número más de animales sin importancia, como somos todos cuando viajamos.
TBA nos está matando, y ustedes no hacen nada para evitarlo. Le entregaron unos hermosos trenes de dos pisos, que fue como entregarle un Ferrari a un nene de 5 años para que juegue.
Le dieron algo maravilloso a una empresa que es tan incapaz de resolver problemas que yo ya no me sorprendo con las cosas que veo.
Doy unos ejemplos:

Problema: Por alguna razón a la gente se le ocurrió que en furgón se puede fumar, y hay tanto humo que la gente se ahoga y no puede respirar.
Solución de TBA: Sacarle las ventanas a los furgones para que salga el humo.

Problema: La gente no paga el boleto.
Solución de TBA: Amenazar con una multa si no tienen boleto a la salida, pero liberar todos los molinetes y tener a dos guardas que en lugar de revisar los boletos, revisan sus mensajes de texto.

Problema: La gente no quiere salir de un tren que se canceló sin explicaciones.
Solución de TBA: Mandar un par de empleados de TBA a que insulten a la gente, les chisten y les digan "fuera, fuera, fuera" como si fueran perros para que se vayan.

Si TBA fuese un doctor, curaría las fracturas expuestas con apósitos adhesivos.

Lo que pasó ese miércoles no nos soprendió a ninguno. Lo primero que pensé fue "ufff, ¿y ahora qué pasó?".

Lucas Menghini viajaba en el mismo vagón que yo. Estaba en una cabina en la que está prohibido estar.
Bah, los pasajeros creemos que está prohibido entrar ahí porque en realidad no hay prohibiciones explícitas. Pero a veces entramos, ¿saben por qué? Porque ahí dentro se viaja muy mal.
Pero afuera se viaja extraordinariamente horrible.
Quisiera que Nilda Garré viaje durante un año en el Sarmiento, a ver si no considera jamás ni por un segundo viajar allí dentro.
No, Lucas no tuvo la culpa.

La culpa la tienen ustedes porque no le dieron otra opción a Lucas. Ni a ninguno de los otros 50 pasajeros fallecidos. ¿Qué hace falta para que hagan algo? El miércoles se les sumaron 51 muertos que ustedes tienen que cargar sobre sus espaldas. Durante el resto de su vida van a sentir ese peso. Como les dije al principio, considero que TBA es el Diablo en persona. Estén seguro de que va a seguir matando gente.

Mis padres me enseñaron a no usar la palabra "odio", porque es una palabra fuerte. Pero se los tengo que decir: Los odio. Los odio por lo que le hicieron a Lucas.
A Lucas Menghini, a los 50 Lucas que murieron en esa tragedia, y a los 40 millones de argentinos que desde el 22 de Febrero de 2012 también nos llamamos Lucas.

GUSTAVO CHAZARRETA Y SUS "TAPADAS" MEMORABLES

                                                                                               Por Roberto Vozza
De la rica cantera que el baloncesto santiagueño gestó a lo largo de varias generaciones, surge como uno de sus íconos la figura de Gustavo Adolfo Chazarreta. Alto, de brazos largos y preciso en las entregas, tuvo por virtud saber ubicarse ofensivamente en los límites de la llave del equipo contrario y cuando recibía el balón en esa posición su pivoteo para encontrar el momento justo del lanzamiento en gancho era acompañado de un movimiento de cuerpo que hasta daba la sensación de que parecía estar bailando una zamba. En cada uno de ellos, el espectador se deleitaba porque sabia que el talento del “Mono” en esa posición llevaba seguro destino de gol. Y la tribuna bramaba cuando la obra se consumaba exitosamente.
Gustavo se formó en el Santiago BBC. Debutó en primera a los 16 años. Hizo gala por herencia la larga trayectoria de su padre, del mismo nombre – el “Mocho” como le decían  y en el mismo club- que en mucho contribuyó a forjar también las memorables performances del basquetbol santiagueño en muchos campeonatos argentinos y retirarse del juego hasta pasados los 40 años de edad cuando sus rodillas se quedaron definitivamente sin flexión.
Por entonces, la actividad basquetbolistica en Santiago era permanente y un convite noche a noche de lunes a viernes, con los partidos de las divisiones primera y ascenso. Pero también se estimulaba y con subida repercusión con los juegos del seleccionado en partidos amistosos contra equipos foráneos de algún renombre nacional o internacional.
El escenario, la primitiva cancha de Estudiantes Unidos, lindera con el Teatro 25 de Mayo.
Un año de la década del 60’ llegó Peñarol de Montevideo para mostrar su curriculum de figurar entre los planteles mas calificados del continente.
Como era habitual, el debut de los visitantes era contra un combinado que generalmente lo conformaban Inti y Estudiantes Unidos, reservandose para noche siguiente la confrontación contra el seleccionado local.
En el plantel de los “mirasoles” de la otra orilla del Plata, un jugador habrá de destacarse: Danilo Coito. De baja estatura pero buena contextura física, se convirtió en la pesadilla para la escuadra rival aquella primera noche por su efectivo goleo. De la posición y distancia que fuese tiraba y embocaba… Hasta cuando estaba ligeramente recostado en el piso del playón, la metia… Fue la figura central del partido precisamente por esa virtud, que en el argot basquetbolistico “enfermó” a los santiagueños.
Llego entonces el compromiso contra la Federación Santiagueña a la noche siguiente… Podrá Coito repetir su goleo? Al principio pareció que si, hasta que el talento de Gustavito Chazarreta se lo impidió causandole hasta vergüenza.
Cuando el talentoso jugador santiagueño le “encontró el molde” lo anuló con espectaculares tapadas. Tuvieron tal efecto esas acciones, que en la sucesión de reiteraciones del tiro al aro rival del jugador uruguayo, las manos de Gustavo las bloqueaban con tanta precisión y contundencia que el público terminó solazándose por el espectacular y hasta sonoro efecto que estas producian… Fueron cuatro magistrales tapadas sucesivas que retumbaron en las paredes del estadio en otros tantos reiterados propósitos del uruguayo de repetir la performance del dia anterior.
Ese episodio avergonzó decididamente a Danilo Coito que debió ser reemplazado para no volver mas al terreno de juego.
Gustavito Chazarreta, habia logrado entonces una de sus noches mas brillantes e inolvidables que coronó ademas con un triunfo inobjetable de la selección local.  


¡TE PERDONAMOS COBOS!

 

 La historia los juzgara, sin lugar a dudas. Julio Cobos saldrá libre de culpa y cargos y Amado Boudou al paso que va sera condenado con varias perpetuas. Que dirá nuestra presidente que lo defenestro a mas no poder a su vice anterior; hasta en la casa de este en Mendoza, dijo " que lindo es tener un vice" la muy turra que irradia maldad por todos los poros de la piel.
     Al final a Julio Cleto Cobos se lo puede acusar solo de su "voto no positivo" cuando fue la de la 125. No se llevo ni un solo centavo a su casa. Se fue como llego, sin nada. En cambio el vice estrella a dos meses de asumir ya metió la mano en la lata, no se puede decir que mostró los dientes porque los vive mostrando con esa sonrisa burlona que tiene.
    Claro Cobos no les servía al proyecto de  los Kirchner, era muy honesto. Otra que lo maltrataba era la vieja de los 700 millones, Hebe. Ya nadie habla del tema, como de tantos otros en donde se tiene que investigar la corrupción.
     El ingeniero nunca contesto un agravio. Jamas insulto a nadie. Fue un señor. En este país la gente como el no sirve. Aquí son rey La Campora, Nilda Garre, Anibal Fernandez, Abal Medina, Jaimito Moreno, De Vido, los Kirchner, y tantos otros monos que bailan por la plata.

EL HOY DE COBOS

Apenas concluyó su mandato como vicepresidente, Julio Cobos decidió volver silenciosamente a su Mendoza natal, donde desempolvó el título de ingeniero civil, convocó a su viejo equipo de colegas y, desde fines del año pasado, se dedica tiempo completo a la actividad privada.
Su oficina es diminuta. Allí, el ex vice trabaja con diferentes técnicos, incluida su esposa, Cristina, quien combinó en los últimos años “algunas changas” –bromea Cobos– como ingeniera y su rol como segunda dama. En el pequeño cuarto hay un escritorio grande lleno de papeles y varios planos de estructuras. “Ya tengo confirmados a dos clientes. Son emprendimientos inmobiliarios particulares. Estoy tranquilo. Costó reiniciar una actividad que hace mucho que no hacía, pero extrañaba la vida provinciana”, cuenta.
La rutina de Cobos hoy es, sin duda, mucho más apacible que en los últimos años en los que quedó aislado de las decisiones del gobierno nacional. “Padecí mucho estos últimos años. Me gusta la cosa pública pero viví un tiempo de locura en Buenos Aires”, confiesa el mendocino.
Cobos se levanta a las 6 y alrededor de las 8 llega a su oficina del centro y se pone a trabajar, “como en los viejos tiempos”, hasta el mediodía. La siesta, dice, es “sagrada”, ya que aprovecha para correr por el Parque General San Martín, actividad que nunca abandonó. Incluso, los fines de semana ya no sufre el trajín de los viajes apurados en avión y afirma que aprovecha el tiempo ocioso para estar “en familia y con amigos”.
El radical también está lejos de volver a la docencia y, menos aún, de ocupar un cargo jerárquico en las universidades públicas, (fue decano de la Universidad Tecnológica Nacional). “Estoy viendo de tomar algunas horas en la universidad pública pero no quiero volver a dedicarle tantas horas”, asegura. Ante la consulta sobre sus honorarios en el ámbito privado, sonríe y aclara: “No soy carero. Soy justo y me rijo según lo establecido por el Consejo de Ingenieros".(Perfil)

ARTURO LUNA, EL LEGADO DEL INTI

                                                                                                               Por Roberto Vozza 
Tiempos romanticos del querido basquetbol de Santiago, esa actividad  que cayó a plomo y puso a la provincia en el mapa nacional del deporte, generando espontáneamente grandes talentos como los hermanos Raúl y Carlos Sánchez, Rafael LLedó, Paco Barrientos Gustavo Chazarreta, Alfredo Tulli, Benjamin Arce, los hermanos Carlos y Hugo Ríos, Miguel Cortijo… Una lista interminable que conjugó próceres y patriarcas en cada uno de sus tiempos.
Y a la par, los dirigentes. Aquellos que con esfuerzo personal y de los amigos sostenian las instituciones donde la práctica oficial fue siempre amateur, por amor a la divisa.
Y asi apareció el “Gordo” Arturo Luna. De baja estatura, regordete, bien recortados bigotes y muy atildado en su impecable vestir. Inteligente, intuitivo, y trato refinado que con su voz bien varonil y una condición natural para el discurso, se lucía con sus parlamentos en los congresos de los Campeonatos Argentinos a los que concurrió siempre en calidad de delegado por Santiago para defender a ultranza no solamente a su provincia sino al baloncesto nacional.
Le tocó presidir el Inti Club en una de sus etapas mas brillantes entre las década del 50’ al 60’ donde no solo era el consecutivo campeón local, desplazando a Santiago BBC – los clásicos rivales esa época – sino consagrarlo Campeón Argentino de Campeones en propias tierras santiagueñas en 1959.
Luna habia alcanzado a la par una cómoda posición económica con representaciones comerciales y tuvo tres hijos: “Pepe”, Arturo y Roberto.
Con el pasar de los años y su consecuente avanzada edad muchos de esos roles se fueron desdibujando hasta que una enfermedad le dio un destino recoleto y final en su amplia y cómoda vivienda de la calle Buenos Aires, muy cercana al club de sus amores.
A pocos dias de morir, en los años 80 llamó a “Pepe” el hijo mayor, para que con su estilo imperativo decirle… “Abrí esa caja fuerte…hay una escritura… tienes que entregarla a los directivos del club.
El documento rezaba que Arturo Luna vendia al Inti el terreno donde se levantaba la institución en calles Buenos Aires y Mitre en la suma de 1 peso, moneda nacional.
Un gesto preclaro de desinterés y amor por una institución y el deporte favorito de los santiagueños  que mas que haber sido un legado para ella, él se habia convertido en eso para su querida divisa.

martes, 28 de febrero de 2012

ANTES DE QUIMSA, LA FUSION PODRIA HABER SIDO INTI-SANTIAGO

                                                                                                  Por Roberto Vozza
En casi un siglo de su instauración en 1922, cuando llegó el primer reglamento a Santiago del Estero, el baloncesto provinciano descubre originales historias.
Una de ellas, y poco conocida, es que en la década del 60’ Inti Club y Santiago BBC podrian haber iniciado el camino a una futura fusión, la que mas de dos décadas después se concretó junto con Estudiantes Unidos para conformar lo que es hoy la Asociación Atletica Quimsa, que disputa actualmente la Liga Nacional.
Y ya que repasamos historia… Santiago BBC fue el primer club de basquetbol de la ciudad. Primero se llamó Park Lawn Tennis, y tenia por escenario una cancha de tenis en lo que hoy es la Asociación Bancaria con asiento en el Parque Aguirre. Después, como Santiago BBC emigró a la esquina de Salta y Perú hasta 1948, porque el terreno fue vendido para erigirse entre otros, la Iglesia Evangélica. En 1950, estrenó su nueva cancha en calle Urquiza, en un lote contiguo al convento de Santo Domingo, que pertencía a esa comunidad religiosa, que los dirigentes lo adquirieron con la autorización del Vaticano.
Inti nació mas tarde, en 1931, y fue por decisión de un grupo de ex condiscípulos del Colegio Nacional “Absalón Rojas” para poder reunir la cantidad de clubes que exigía la Confederación Argentina e incorporar oficialmente a Santiago a su éjida.
Oscar Alfaro, un preclaro dirigente de entonces, fue el motorizador. Y él con otros ex compañeros del Nacional, a pico y pala acondicionaron un terreno en calle Buenos Aires al 500. Inauguraron la cancha y el club, crease o no, con una improvisada iluminación para jugar un partido nocturno con un equipo de Tucumán.
Pasaron los años. Santiago BBC venía siendo campeón consecutivo e indiscutido desde 1932 a 1948 de la mano de LLedó, Chazarreta padre, Reynoso, y muchos otros. Luego tomó la posta el Inti que hizo su nueva cancha, pero siempre de dimensiones estrechas, en la esquina de Buenos Aires y Mitre, hasta su desaparición. Estudiantes Unidos, pese a ser el club mas pudiente y con mas arraigo político en el medio y contar con el mejor escenario para el basquetbol en la ciudad, nunca en su historia alcanzó tal halago.
Los dirigentes se sucedian. Inti tuvo a otro destacado como lo fue Arturo Luna, el “Gordo”, sucesor y delfín de Alfaro; locuaz en los congresos de los campeonatos argentinos y participe de inolvidables batallas dialécticas.
A él le siguió por un corto período un español llamado Lorenzo Río García, que habia comprado el histórico y emblemático Hotel Savoy, a una cuadra de la plaza Libertad y se manifestó un enamorado del juego y de la divisa auriazul con un sol improntado en el centro.
Arturo Luna, su dilecto amigo, le da un dia el aviso: “hay un lote en calle Buenos Aires casi Urquiza, de grandes dimensiones, y cuyos fondos dan con la cancha de Santiago BBC. Ahí podemos hacer nuestro nuevo solar”.
La idea entusiasmó a Río García y la gestión de compra, era virtualmente un hecho.
Al lado de la cancha de Santiago, el conocido empresario oriundo de la Pcia.de Buenos Aires, pero naturalizado santiagueño y dirigente deportivo don Miguel Tauil habia construido una mansión de dos plantas para habitarla con su familia.
Cuando éste se informa de que el Inti compraba un terreno que desembocaría en los tendidos de Santiago BBC  imaginó el futuro para la tranquilidad de su dulce y señorial hogar.
Convocó entonces a Luna y Río García para decirles a modo de impetración: “si ustedes hacen una cancha allí, yo debo irme de aquí. Demasiado ya tengo con Santiago BBC con su actividad permanente".
Luna y Río García lo entendieron, y el proyecto de la nueva cancha del Inti quedó esfumado. De lo contrario, con los años, esas dos divisas tradicionales del baloncesto santiagueño podrian haberse unido y convertirse en la primera fusión de la historia.

lunes, 27 de febrero de 2012

LOS 29 DIAS DE ESTE FEBRERO

1Este año es año bisiesto, esto quiere decir que este año tiene 366 días en vez de 365. Esto hace que el "año calendario" se mantenga según las estaciones del año. En losaños bisiestos, febrero tiene 29 días en vez de 28.
2La tierra tarda 365,256 dias en darle la vuelta al sol. Por eso, cada 4 años, necesitamos un año bisiesto, para que las estaciones no se confundan, y el primer día de primavera, por ejemplo, siga siendo el 21 de marzo. Si todos los años sólo contásemos 365 días, después de 12 años estaríamos 3 días desfasados....
3En el año 46 antes de Cristo, Julius Caesar aprobó el calendario juliano que incorporó el año bisiesto. Su sucesor, el Calendario Gregoriano, incluyó años bisiestos cada cuatro años, según un ciclo de 400 años. La mayoría de países iba adoptando este calendario, fijando el primer día del año en el 1 de enero.
4Se dice que el día 29 de febrero, año bisiesto, las mujeres pueden proponer matrimonio a su novio. Si el novio no acepta, por tradición debe compensar a su novia con un beso y un camisón de seda.
5A las personas que nacen el día 29, se les denomina "Leapers", palabra cogida del término "Leap year", año bisiestro en inglés. En teoría, una persona que cumple los 28 años el día 29 de febero podría decir que cumple 7 años.
6En Irlanda algunos años , los bebés que nacen el día 29 de febrero, año bisiestro, recibirán un premio de £70, setenta libras.
¡Feliz cumpleaños a todos las personas que cumplen años el día 29 de febrero!


Euroresidentes



ERNESTO PALAZZI: LA FUGAZ PROMESA

De izquierda a derecha, Paco Barrientos, Alfredo Tulli, Ernesto Palazzi, Benja
Arce, "Quebracho" Torres e "Inqui" Rios en el argentino de Misiones


                                                                 Por Roberto Vozza

Febrero de 1962. A orillas del Paraná, Santiago del Estero y Córdoba juegan una de las finales mas dramáticas en la historia de los campeonatos argentinos de básquetbol.
Cordoba va en ventaja por un simple. Faltan 10 segundos.
Hugo Olariaga, considerado el mejor jugador del certámen debe jugar en saque el balón para el equipo cordobés.
Expectante a la acción, está cerca un chiquilín debutante en Santiago del Estero quien resolverá, en lo insólito e inesperado del partido, la definición de la puja. Se llama Ernesto Palazzi. Tiene 18 años.
Carlos Rios “madruga” a Olariaga e intercepta su pase, cachetea la pelota, la toma Palazzi que se manda al tablero como una saeta y encesta. Santiago pasa a ganar ahora por la minima diferencia.
El estadio hierve… hay estupor y nerviosismo en Cordoba porque se le está yendo el campeonato. Tiene que reponer Hausberguer para los cordobeses, pero pisa línea y el saque cambia de bando. Recupera la pelota Santiago. Recibe el balón Rios y le cometen falta. Ejecuta dos lanzamientos. Convierte uno. Ya no queda tiempo. Los santiagueños contra todos los pronosticos  son los campeones después de 14 años en un argentino.
Santiago del Estero habia concurrido a Misiones con un plantel renovado, conformado por varios juveniles, después de la floja actuación anterior en Formosa donde primó la indisciplina, según se cuenta hoy.
“Paco” Barrientos se encargó de prepararlos sin contar con figuras clave y reconocidas como las de Gustavo Chazarreta y Jorge Saad. Confió en los noveles  Palazzi- que concurrió como suplente el año anterior- Luis Marquetti, Hugo Abutti, Guillermo Correa, José Butiler, José Flores y Luis “Quebracho” Torres para ponerlos a la par de los consagrados Alfredo Tulli, Benjamín Arce y Carlos Rios y los experimentados Aníbal Gimenez y “Bachicha” Martinez. Viajaron a Posadas sin crédito,  pero se trajeron el  campeonato.
Ernesto Palazzi será la revelación de Posadas. Hábil, veloz, de entradas penetrantes bajo el tablero rival con destino de gol, y además con una efectiva media distancia que en la noche de la final le hizo 34 puntos a los cordobeses. Y en los siete partidos del campeonato, donde Santiago solamente perdió ajustadamente contra Chaco, promedió casi los 23, para figurar entre los cinco mas efectivos goleadores.
A esas excelentes cualidades que lo erigían en promesa, se le sumaba la picardía del chico de club de barrio; del “pibe de potrero” como se dice en el argot futbolero.
Se formó en Gimnasia y Esgrima, club que ya no existe como tal, y cuyos tendidos hoy pertenecen a la Asociación de Veteranos de Básquetbol. No tuvo maestros. Solo era su intuición y seguramente la influencia del “espejo” de lo que hacían los mas experimentados para mostrarlo con condiciones de ser potencialmente un brillante basquetbolista.
Ese asentamiento está ubicado a pocas cuadras del centro. Pero en aquellos tiempos su espíritu se imbuía de un sentimiento profundamente barrial, a contracara de sus conspicuos y casi vecinos Estudiantes Unidos, Inti y Santiago BBC.
Ganarle a Gimnasia y Esgrima en su cancha era entonces un doble triunfo, por tratarse de un verdadero fortín de arraigado orgullo popular, tanto en jugadores como socios e hinchas.
Y allí estaban precisamente defendiendo “a muerte” la divisa, él junto con Hugo Abutti, Orlando Avila, Luis Marquetti, y el rudo y áspero juego del veterano Ricardo Ramendo.
Por esos tiempos también fulguraron allí los recordados mellizos Bruno y Arnaldo Ingratta que jugaban de memoria - se entendían sin mirarse - y se los llevó por eso el Santiago BBC.
Esa misma suerte habrá de correr en su vida basquetbolística Palazzi, cuando Arturo Luna, presidiendo el Inti Club, logró su concurso al entender que su pase, cumplidos los dos años reglamentarios de espera para militar en primera división, reforzaba la continuidad del éxito para la tradicional divisa auriazul al seguir conformado como un poderoso equipo.
Con otra escuela de básquetbol, entonces, sus potencialidades para ser un jugador de enorme futuro a nivel país, estaban aseguradas.
Volvamos a febrero del 62’. El titulo es ruidosamente festejado en Santiago con lo que se palpa el fervor por el básquetbol. La gente ha ganado sus calles. Los clubes de todos los rincones de la ciudad se suman al acontecimiento encendiendo sus luces con gente concentrada portando banderas; en los pueblos del interior la escena se repite. Se organizan manifestaciones para cuando se produzca el paso de los campeones al regreso por las rutas santiagueñas… todo es fiesta…
Pero esta historia tendrá un ultimo y triste capitulo; el del post campeonato y la brusca opacidad de esta estrella  cuando junto con Luis Marquetti fue inculpado del robo de un objeto en un comercio asunceño, lo que le valió a ambos una suspensión de por vida por resolverlo así la Confederación Argentina de Basquetbol.
Durante muchos años la dirigencia del básquetbol local bregó mediante ingentes gestiones en pos del  levantamiento de la dura sanción. El “indulto” llegó en 1969, pero aquella suspensión significó un estigma en la moral de los dos muchachos.
Volvieron a la selección para el campeonato argentino de ese año disputado en San Luis. Marquetti puso virtualmente allí el final  de su carrera. Palazzi cumplió una buena actuación, aunque denotando no tener ya el gran brillo mostrado en Misiones.
Lo hará después en los cuatro certámenes subsiguientes. Ya había dejado el Inti Club para enrolarse en Atlanta de la Capital Federal a la par de Benjamín Arce y Hugo Ríos, hermano del “Inqui”, que dejó un buen recuerdo como jugador en el club porteño por sus cualidades.
“Esa suspensión decididamente lo mató como basquetbolista. “A su hora fulgurante, Palazzi se había mostrado en Santiago como lo mejor que se vió en décadas de mitad de cancha hacia delante”, sostiene Fernando Areal,  jugador de esos tiempos. 
Tal opinión se refuerza con la de “ Paco “ Barrientos al recordar a los campeones de 1962 para señalar que de no haber mediado tan dura sanción, Santiago se proyectaba a ser firme candidato a la obtención de mas titulos argentinos en los años subsiguientes respaldado por el notorio surgimiento de otros nuevos valores.
Ernesto Palazzi podría ser parangonado acaso hoy, como el Miguel Cortijo de los años 60’. Su corto éxito amerita entonces en quedar para la historia como lo que fue: una gran pero fugaz promesa, tronchada lastimosa y estúpidamente.

sábado, 25 de febrero de 2012

LA INUNDACION DE VILLA LORETO

 
  Mi abuelo materno, Ramón Ibañez, profesor de telares, era loretano. Recuerdo que cuando era niño me solía contar sobre la luz mala y sobre las famosas inundaciones de Villa Loreto y que la gente de la época comentaba que en la punta del caudal de agua y barro se había visto a la Virgen de Loreto. Crecí escuchando esos relatos que no dejaban de sorprenderme. Navegando por internet busque aquella historia y en la pagina de la Fundacion Cultural Santiago del Estero encontré un articulo firmado por María Mercedes Tenti que me hizo retornar a mi niñez. Esta es la nota de la señora de Tenti:
La antigua Villa de Loreto se había ido conformando, con el correr de los años, en el siglo XVIII, en la antigua estancia de los Islas, a la vera del camino al Alto Perú. Sus habitantes aprovechaban las inundaciones del río Dulce para hacer sementeras y sembrar en épocas de inundaciones; también construían pozos de agua para abrevar el ganado, especialmente ovejas y cabras de las que obtenían lana para sus telares.
La imagen de la Virgen de Loreto, traída por los jesuitas, ya se reverenciaba desde el siglo XVI cuando estaba en posesión de la india Lula Paya, según la tradición oral. En 1731 Catalina Bravo de Zamora hizo construir una capilla, capilla que fue reconstruida varias veces como consecuencias de las inundaciones del río. Hasta fines del siglo XVIII dependía del curato de Tuama, hasta que en 1793 fue erigida parroquia. La nueva iglesia comenzó a construirse a partir de 1830, por iniciativa del gobernador Juan Felipe Ibarra, cuando era párroco Pedro Francisco de Uñarte. Uriarte había sido designado representante por Santiago del Estero ante la Junta Grande y se desempeñó como tal en el Congreso Constituyente reunido en 1816 en Tucumán, trasladado luego a Buenos Aires.
En la tercera década del siglo XIX, Loreto comenzó a declinar, como consecuencia del cambio de cauce del río que la dejó sin el líquido vital para hombres, mujeres, cultivos y ganado. Otra vicisitud fue causa de su decadencia: el ferrocarril que conducía a Rosario tendió sus vías esquivando la antigua villa; La estación Loreto era la escala más próxima. Poco a poco se fue notando el éxodo de pobladores que emigraban en busca de horizontes más promisorios. Los censos de 1869 y 1895 constituyen una prueba irrefutable de ladisminución de la población:
Si bien la economía de la zona había decaído, el departamento contaba con 10 atahonas a muía -que abastecían de harina a la zona-, 3 obrajes y una fábrica de materiales. Antiguos comercios y otros nuevos proveían a la población de lo necesario para la vida: 3 almacenes por menor, 3 bazares, 4 carnicerías, 1 casa consignata-ria, 7 corredores comerciales. Los 18 "boliches con licores" eran un ámbito de socialización eminentemente masculina (Fazio). Las mujeres se reunían en tertulias en las que ejecutaban el arpa y cantaban (Gancedo).
A comienzos del siglo XX se organizó una comisión para la construcción del templo en la estación y se colocó la piedra fundamental. La capilla fue inaugurada en 1904 (AP). La capilla de la villa estaba bien conservada. El altar tenía un sagrario movible de algarrobo y dos confesionarios del mismo material. El baptisterio poseía una pila bautismal de mármol. Contaba con importantes imágenes, entre las que se destacaba la de Nuestra Señora de Loreto, un Señor crucificado de 2.20 m de madera (que actualmente se encuentra en la capilla de Perchil Bajo), la Dobrosa de rostro encarnado, Purísima Concepción, San Luis, Jesús Nazareno de vestir, San José y Santa Bárbara -a cada lado del altar mayor- y un vía crucis con cuadro y cruz de madera, según consta en el inventario conservado en el archivo parroquial.
El clamor por el agua
Desde el momento en que la naturaleza hizo variar el cauce del río, el anhelo de los moradores que quedaron en la zona, más el de los inmigrantes que llegaban en busca de nuevos horizontes, era contar con el agua necesaria para impulsar nueva vida a la antigua villa. Ya en 1896 el gobernador Adolfo Ruiz gestionó la venida de un ingeniero especialista en hidráulica para proyectar una serie de obras, entre ellas el canal de Tuama a Loreto, construido durante su gobierno.
Pero la bendición del agua duró muy poco. Si bien en 1903, el canal regaba 887 has. el gobernador Pedro Barraza, en su mensaje anual a la legislatura, señalaba los problemas de su mantenimiento: la bocatoma era angosta para el caudal de agua que se vertía y no se había realizado la compuerta para que, en épocas de crecientes, se detuviera el paso de las aguas. En 1907, José Santillán denunciaba en su mensaje que el río, durante las últimas crecientes, se volcaba impetuoso por el canal el cual, al no tener compuerta, no sólo no contenía el agua, sino que provocaba además el desborde hacia otros rumbos, en forma de verdaderos brazos del río, poniendo en peligro la villa de Loreto. Si bien, la provincia había comprado y traslado materiales para iniciar la obra, argumentaba el gobernador que no se contaban con los fondos necesarios para emprenderla sin el auxilio de la nación, ya que su costo ascendía a $500.000.
Primeras inundaciones
Generalmente se tiene conocimiento de la inundación que arrasó con Loreto en 1908. Sin embargo, ésta no fue la única. Dos inundaciones ocurridas un año antes preanunciaron la tragedia y, sin embargo, los poderes públicos no tomaron los resguardos necesarios para preservar la vida y los bienes de sus moradores.
El 31 de diciembre de 1906, mientras los santiagueños y santia-gueñas celebraban la llegada de un nuevo ano, la compuerta intermedia de defensa del canal Tuama-Loreto, que estaba en construcción, se rompió por la fuerza de las aguas que comenzaron a entrar en la villa, ante el pánico de la población. Todo enero, luchando contra las adversidades y el calor, los vecinos se pasaron construyendo bordos alrededor de sus casas para evitar que el agua las arrasara. No sólo se había desbordado el canal, sino que el agua se había escurrido por el brazo seco del río Pinto, inundando campos y cultivos. "La zona se ha convertido en un mar con una pequeña isla que es Loreto", afirmaba El Liberal.
Cuando todo hacía pensar que la villa estaba a salvo, sobrevino una segunda inundación, a los pocos días, a fines de enero de 1907. La creciente nuevamente rompió el bordo del canal, en El Yugo, e inundó casas y quintas. El 13 de marzo entró el agua a la villa, anegando plaza, escuela y muchas viviendas. Las familias, a la intemperie, esperaban ayuda que no llegaba. En abril, nuevamente se rompió el bordo improvisado a fuerza de trabajo y coraje de los moradores, que luchaban por preservar el poblado. El agua alcanzó 50 cm. en algunas partes y en otras aún más. Las familias huían de sus hogares, buscando lugares altos, presas de pánico, mientras los ranchos comenzaban a desplomarse y escaseaban los víveres. Los trabajos de defensa eran infructuosos. Al mismo tiempo, un centenar de hombres trabajaba denodadamente colocando bolsas de arena para detener la corriente, animados por un grupo de músicos que, al compás de bombo y violín les daban aliento, mientras el agua avanzaba implacable. En medio de llantos desconsolados, la gente se congregaba en la iglesia haciendo rogativas a toda hora. Un bordo alrededor del edificio contenía la gran masa de agua. Con el paso de los días recién las aguas comenzaron a descender. Sin embargo el daño ya estaba hecho: Casas derrumbadas, enseres perdidos, el cementerio inundado y chacareros y quinteros con sus productos inutilizados.
Ante los hechos tan graves ocurridos el año anterior, en 1908 Santillán comisionó al Director de obras Públicas Ing. Tomás Bruzzone para la prosecución de las obras del canal de Tuama, obras que no eran más que un paliativo, por cuanto la ampliación del canal y la construcción de la compuerta no se habían iniciado a la espera de fondos que debía aprobar el congreso nacional. El preanuncio de la tragedia comenzó en la capital santiagueña, jaqueada por la inundación a mediados de diciembre. El 19 la creciente rompió los bordos del canal a la altura del Yugo y el agua comenzó a avanzar, nuevamente amenazante, sobre la villa de Loreto.
El 20 se desencadenó la catástrofe; el 21 de diciembre de 1908 Loreto sucumbió al avance de las aguas que, en algunos puntos superaba los dos metros y medio de altura. A pesar de los esfuerzos de operarios y habitantes, no se pudo evitar el avance de las aguas. Faltaban brazos; los peones estaban extenuados luego de trabajar día y noche en forma agotadora. Los ranchos comenzaron a derrumbarse y las familias desesperadas, esperaban ayuda a la intemperie. Desde Loreto, a través del telégrafo, llegaban a Santiago los pedidos de auxilio: carpas, galletas para los peones, alimentos, ropa.
Si bien el gobierno provincial mandó por tren cuadrillas de servicio para reemplazar a los extenuados peones, 30 soldados y carpas y abrió una cuenta especial denominada "Gastos inundación Loreto", todo fue inútil. La población estaba convertida en un lago. Casi todas las familias tuvieron que emigrar apresuradamente. Afortunadamente, no hubo que lamentar víctimas fatales, según pudo constatarse en los libros de defunciones de la villa y de la estación Loreto, en el Archivo del Registro Civil de Loreto.
Esta vez se daba por descontado la total destrucción de la villa. Nuevas crecientes más el enlame producido con troncos y árboles que destruían las defensas e imposibilitaban que el agua retrocediese, hacían más dramática la situación.
Se necesitaban botes para el
traslado de personas ubicadas en los lugares altos, víveres para alimentarlas y abrigos. La ayuda no llegaba debido a la misma creciente que no permitía el arribo de botes, a la falta de trenes y a la inoperanciadel gobierno provincial.
Los pobladores emigraban: unos a la estación y otros sobre el río viejo. Todas las casa estaban inundadas, incluidas la iglesia y la escuela. Sólo el edificio del telégrafo, construido en una zona elevada, se había salvado y era el único contacto con la capital. A pesar de los esfuerzos de Bruzzone, que pedía auxilios desesperados, la villa fue abandonada. Las autoridades de la localidad se trasladaron a Chimpa Macho, a 15 cuadras al este de la villa. Cuando llegaron tardíamente los botes, mujeres y niños pugnaba por subirse a ellos, mientras las casas se derrumbaban y los hombres trataban de preservar muebles, ropas y mercaderías. Con los botes llegó también la ayuda del gobierno y se comenzó a distribuir víveres entre los pobres.
La navidad de 1908 fue sin dudas la más amarga que pasaron los loretanos. Habían perdido todo. La población acampada en un lodazal esperaba ayuda, que demoraba en llegar. Sólo la iniciativa privada brindaba su apoyo y solidaridad a través de las comunidades extranjeras (especialmente la española), el Conservatorio Verdi y las conferencias de San Vicente de Paul de Buenos Aires. "Ya que el elemento nacional no se siente obligado a correr en auxilio de los que sufren hambre y enfermedades lo hacen los extranjeros", denunciaba El Liberal. El Congreso nacional no enviaba el auxilio de $20.000, al no sancionar la ley respectiva "por falta de quorum". Una vez más, los representantes estaban ausentes a la hora de bri ndar el apoyo a sus representados.
La venerada imagen de la virgen de Loreto, según la tradición, fue salvada en un bote por el párroco Retambay y llevada a la capilla de la estación. De la antigua iglesia desaparecieron en la inundación, conforme al inventario realizado, sacristía, baptisterio, depósito, retablo, tabernáculo, barandas de madera, altares, túmulo, araña, tumba para pozos en los entierros, dos confesionarios de madera, un reloj de campana y uno de mesa, piano de cola, crismeras de plata, vinajeras, bujiario y dos pilas de agua bendita de mármol. Todo lo demás pudo salvarse.
La fecha de la inundación que destruyó Villa Loreto, 21 de diciembre de 1908, ya fue señalada por el historiador Luis Alen Lascano en su obra Historia de Santiago del Estero. Numerosas e invalorables fuentes ratifican esta fecha y describen paso a paso la forma en que se fue desarrollando la catástrofe, en particular la información contenida en la colección de El Liberal y de El Siglo -que permanecen microfilmadas en el archivo de El Liberal-, que describen las dramáticas jornadas.
Por tratarse del desborde de un canal, la inundación se produjo lentamente, dando la posibilidad, a la mayoría de sus moradores, de poner a salvo sus pertenencias y de alejarse de la zona anegada, pasando en botes al otro lado del río Pinto. Pero ¿por qué se destruyó Loreto? Ambos diarios dan cuenta de las penurias de la villa: Por un lado, una copiosa lluvia -del mismo día 21- dio "el golpe de gracia a la población" y por otro, el más grave, a partir del 22 de diciembre el agua siguió aumentando, porque el canal se encontraba obstruido aguas abajo con un gran enlame, originado por el estancamiento de los árboles arrastrados por la corriente, que formaron una 'tranca' en la embocadura del río Pinto. Por la escasez de recursos y hombres el deslame se hacía imposible, según lo denunciaba el Ing. Bruzzone. Por esta causa, el agua permaneció estacionada en la villa y no pudo retroceder -por la diferencia de nivel- hasta tanto se concluyeron los trabajos emprendidos en el canal de derivación, aguas arriba de Loreto. La mayoría de las viviendas, construidas con adobe, no pudieron resistir el embate de las aguas y comenzaron a desplomarse ante la desesperación de sus pobladores. Si bien algunos habían emigrado en busca de lugares seguros, otros, los más pobres, permanecieron hasta último momento cuidando las pocas pertenencias que les quedaban.
Cotejada la documentación existente a la fecha y analizada contextualmente, se puede afirmar, con precisión, que la destrucción total de la Villa Loreto se produjo el 21 de diciembre de 1908 cuando las aguas alcanzaron, en algunas zonas, 2 metros y medio de altura, según lo consignan El Liberal y El Siglo. Los pobladores hicieron todo lo que pudieron por salvar sus vidas y bienes; la población se destruyó por la desidia de los gobernantes que no completaron la construcción de las compuertas que debían regular el paso del agua del río. El enlame hizo el resto, la antigua Villa de Loreto se convirtió en una laguna que permaneció anegada hasta enero del año siguiente.
Los loretanos recibieron el año nuevo del 1909 en medio del horror y la desolación
LO QUE DIJO EL LIBERAL
 El Liberal del 30 de diciembre realiza una síntesis admirable de los sucesos:
"Hace mucho que la desgracia la persigue.
Repetidas veces ha sufrido inundaciones.
La de hace dos años la amenazó de muerte.
Los habitantes vivían en perpetua zozobra.
Un furioso ciclón la azotó hace poco.
Aun no se habían reparado los daños del tornado cuando una
nueva inundación la sorprende.
Hace 15 días que el canal le lanza la mayor parte de su caudal de agua.
Las casas que no están en el suelo, lo estarán pronto.
La mayor parte esta a la intemperie sufriendo desnudeces,
hambre y peste.
No tienen quien los cure.
Ni medicamentos.
Ni una mano generosa que los ayude en su desgracia. Aexcepción del gobierno.
Pero lo que éste hace es deficiente.
Apenas puede proporcionarles un poco de carnes y eso en
proporción mezquina.
¿Dónde esta la acción particular? ¿Dónde las sociedades caritativas?
No se las ve.
La colectividad española nos da una lección.
Ha sido la primera en levantar una inscripción pro-víctimas de
la inundación.
Mientras tanto la caridad criolla duerme y duerme. Pero se confiesa y comulga"





MENESES EL COMISARIO LEYENDA


Es curioso: el comisario Evaristo Meneses nació el 26 de octubre de 1907, en un pueblo llamado Cuatreros. Justo él, que se convertiría en un infatigable cazador de ladrones.
Treinta años en la Policía Federal le bastaron para transformarse en mito. Fue, seguro, el policía más reconocido de su tiempo; quizás, como ningún otro antes o después. Cosechó cientos de recomendaciones especiales de jefes de policía, jueces y funcionarios del Poder Ejecutivo.
Mucho se habló de sus métodos policíacos, de su mano "pesada" o de una cierta tendencia a dirimir los tantos a balazos. Pero incluso los ladrones a los que perseguía y apresaba, casi como deporte, aseguraban que Meneses era incorruptible y que nunca les hacía "comer un garrón".
El hombre de la calle, la gente común, lo querían. En el bajo Flores, donde vivía, los vecinos lo pedían como jefe de policía.
Estudió en Uruguay, y ya de chico el destino le hacía anuncios. Una vez, una maestra le preguntó qué era para él la policía. Meneses contestó: "Un gallo". Justo el símbolo de la Policía Federal, a la que entró el 2 de enero de 1934, como ayudante de tercera.

DETECTIVE, PERO NO DE NOVELA

De físico imponente, manos como adoquines y cara chata, se lo recuerda como una mezcla de los detectives Sam Spade, Dashiell Hammett y Philip Marlowe, de Raymond Chandler. Pero él, que fue protagonista de historieta en la desaparecida revista Fierro, de la mano de Sampayo y Solano López, decía que lo único que tenía en común con Marlowe era el gusto por el café con crema.
De traje gris oscuro o negro, siempre peinado a la gomina, con su "funyi", el cigarrillo en la mano y su 45 siempre pegada a la pierna derecha, lista para volar a la mano.
Dicen que logró triunfar sobre el hampa porque conocía como pocos la naturaleza humana. Creía que muy pocos ladrones se regeneraban. Pero que no era imposible. A muchos de los que encerró les ayudó a conseguir un trabajo decente. Meneses explicaba: "A lo mejor se cruzan con una mina piola y deciden andar por la buena..."
Desterró la costumbre de detener a gente por su aspecto. Una vez hizo soltar a un hombre cuando vio que tenía los zapatos rotos. "Lo menos que debe hacer un buen ladrón es afanarse un par detimbos . Acuérdense: los delincuentes de verdad andan en coche, bien trajeados y con las uñas lustradas", decía a los suyos.
Si lo acusaban por la presunta dureza de sus métodos para atrapar ladrones, repetía: "Mi picana es el lápiz. Los chorros le tienen miedo a la condena porque saben que conmigo no hay arreglo". Pero a la hora de actuar, no aceptaba dobleces: "Hay que enseñar a disparar lo menos posible. Pero, si es necesario, no hay que errar", era una de sus máximas.
Fue el artífice de los cinco años dorados de la mítica Robos y Hurtos, entre 1957 y 1962, la época dorada de las bandas de pistoleros con nombre y apellido. Meneses atrapó a la mayoría. Muchas veces lo hizo solo, y a mano limpia. Así, cayeron bajo su implacable tenacidad Jorge Villarino -el Rey del Boleto-, Manuel "Lacho" Pardo, El Loco Prieto, José María Hidalgo, el Mono Paz, Juan José "Pichón" Laginestra, Pérez Gris... Pocos se le resistieron.
Cinco años, 1117 robos esclarecidos. Ese fue su récord. Pero le hizo ganar enemigos puertas adentro. Todos sabían que los envidiosos lo obligaron a retirarse a fines de 1964.
Así el mito se volvió investigador privado. Juraba: "Sólo agarro los casos que me gustan".
Con más tiempo libre, se dedicó a la pintura. Y sus manos, otrora duros "adoquines", se volvieron dóciles con pinceles y acuarelas. Nunca los recuerdos de las sórdidas noches porteñas se colgaron de sus lienzos. Sólo había lugar para esos bucólicos paisajes de campo que, de algún modo, lo hacían regresar a su viejo Cuatreros de principio de siglo, como en un círculo que se cierra.
El comisario inspector Evaristo Meneses murió solo y casi sin un peso. Fue el 26 de mayo de 1992. Tenía 84 años. Fue enterrado con honores en el Panteón Policial de la Chacarita. Se había ido el hombre. Pero no se extinguió su leyenda.
LA NACION .